"Adonde sea", del pintor pontanés Enrique Reina Segura. Este lienzo dio título a la pieza breve de teatro con la que se inauguró su última exposición "Lleno, vacío". Pintura y teatro de la mano por primera vez en Puente Genil.

sábado, 18 de noviembre de 2017

Cortogenial en el Teatro Circo de Puente Genil

Cartel 2017. Diseño gráfico: Félix Espejo
Esta noche, el Teatro Circo acoge la gala de clausura de la VIII Edición de CortoGenial.


Una gala a la altura de la cantidad de cortometrajes que se han presentado a concurso: más de 1.200. Presentada con glamour por Mónica Jaén y bien aderezada con el espectáculo Da Mopa de Juan Luis Matilla*.

Hagamos un breve repaso a los cortos premiados:

- Benditas infancias (elegido "por su contundencia y capacidad de síntesis", en palabras de Alicia Baena, miembro del jurado). Este impactante relato de un niño en un campamento terrorista capta cómo la maldad corroe la inocencia. Algo difícil de contar con elegancia, en pocos minutos y en un solo plano. Magistral. 

- La dama de sal, premio RTVA a la creación andaluza, merecido por su ambientación e interpretación, quizá no tanto por su guión. Lo más conseguido del corto es la atmósfera lograda, sobre todo en los planos iniciales, con guiños a lienzos del Romanticismo. Otras escenas recordaban demasiado a la saga "Piratas del Caribe".

- El premio del público, "el más democrático" como insistían los organizadores, recayó sobre Ringo Star, una fábula amable y muy bien contada, de correctísima factura y memorable final. 

En cuanto a las fotografías premiadas, la película La, la, land inspiró a varios de los concursantes, en concreto al que se ha alzado con el primer premio por "Bailando en el polígono". El segundo premio fue para un impactante montaje de King-kong en Puente genil, foto que merecería ser retomada para el cartel de Cortogenial del próximo año, como ha apuntado uno de los integrantes del jurado. El concurso contó con una sección especial dedicada a la saga de la Guerra de las Galaxias.

La sorpresa de la noche (y as guardado en la manga de los organizadores) fue el premio ASFAAN, otorgado a Julio de la Rosa que hizo un hueco a Puente Genil en su agenda. Cantante, escritor y compositor de bandas sonoras para varias películas, entre ellas "La isla mínima", por la que recibió un Goya en 2014.

Sr. Lobezno, David Reina, Julio de la Rosa y Juan Luis Matilla
El músico agradeció el premio de la mejor manera posible, sin grandilocuencias y animando a los aficionados: "sin ponerme a lo Paulo Coelho, si tenéis el gusanillo, adelante... Se necesita poca piedad con uno mismo y seguir persiguiendo ese sueño... Yo mismo acabé haciendo películas por casualidad, mis amigos de Audiovisuales en Sevilla llamaban al músico que conocían, que era yo..."

De acuerdo, don Julio; desde Puente Genil, seguiremos persiguiendo sueños. Y olfateando cuantos eventos programen este puñado de inquietos Cortogeniales.



* Un artista sorprendente. Aunque su plasticidad corporal bebe del imaginario de José Mota y Chiquito de la Calzada, Matilla ofrece una actuación única. Un "concierto bailado" que no deja indiferente al espectador que contempla (entre perplejo y divertido) su juego con un "electro-duende" esquivo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario