¿Quién es esa gitana "alegre y bulliciosa como una pandereta" que se asoma a los carteles de la Feria de Puente Genil este 2018? ¿Y quién es el artista que hay detrás de este revuelo de volantes?
Enrique Reina Segura nos regala un cartel cargado de simbología, muy pensado en cada detalle y ejecutado con maestría. En principio, a Reina le preocupaba representar a Puente Genil lejos de los tópicos explícitos. Por eso el artista decide hacer un guiño subliminal a la Semana Santa, inspirándose en nuestra vieja cuaresmera. De este icono manantero, la flamenca copia la pose de perfil o en tres cuartos, remangándose el vestido en lugar de sostener la canasta.
Seguimos buscando claves pontanas... Observando detenidamente el mar de volantes, sobre las cifras 2018, hay tres volantes que rememoran los arcos del Puente. Y la sombra proyectada por el traje, como un charco azulado evoca el agua del río.
Un tema importante para el pintor es que el mensaje de un cartel debe ser rotundo y claro. Se distancia de los carteles recargados y busca un equilibrio entre texto e imagen. Así, el texto enmarca a la protagonista, usando una tipografía legible y visualmente atractiva. Y la imagen transmite su idea central con expresividad. A un paso decidido y enérgico, la gitana bulliciosa interpela al espectador con fuerza: "¡Vamos a la Feria!", nos dice al vuelo.
Mención especial merecen los colores elegidos, los naranjas y los azules. Unos colores tan complementarios como veraniegos que sirven a Reina para plasmar atardeceres y amaneceres en la feria. Y esas grafías transparentes nos remiten a nuestro pasado como ciudad industrial, ciudad de la luz...
Por último, apuntar que el cartel refleja una realidad fragmentada, como homenaje a Degas, el primer pintor que se atrevió a utilizar este recurso pictórico. Recurso que Enrique utiliza para envolver a esta figura tan resuelta y decidida en el misterio y la ambigüedad.
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